12 al 17/07/2012 JERUSALÉN
Tras nuestro viaje por el sud de Jordania, decidimos cruzar
la frontera hacia Israel vía Eilat. Tal y cómo nos aconsejó un policía cogimos
un taxi hasta la frontera, pero eso sí, le hicimos poner el taxímetro y sólo
nos costó 2,2 JOD (sin taxímetro, nos querían cobrar 5 JOD mínimo). Cruzamos la
frontera sin problemas, aunque nos encontramos un trámite que no esperábamos,
tuvimos que pagar unas tasas para salir de Jordania (8JOD/pers). Una vez en territorio
israelí, preguntamos por transporte público para ir hasta la estación de
autobuses de Eilat, pero no existe, así que cómo no queríamos pagar 10 euros
por 3,5 km en taxi, decidimos ir caminando. La verdad es que por suerte era
temprano y el sol aún no quemaba mucho, pero ¡estuvimos algo más de una hora
caminando con 25 kg encima cada uno! Todo sea por ahorrarnos unos euros, qué el
viaje es muy largo.
El primer día estuvimos todo el tiempo de viaje, pasar la
frontera, caminata hasta la estación de bus, y viajecito hasta Jerusalem. Allí
llegamos ya casi anocheciendo, y sólo tuvimos tiempo de buscar un hostel
barato, dentro de la Ciudad Vieja (Hostel Hebron 60 ILS por persona en
dormitorio compartido).
Monte de los Olivos |
Cementerio Judio |
Piedra de la Unción |
Santo Sepulcro |
Volvimos a la ciudad vieja cruzando la Puerta de los Leones (tiene 9 puertas de acceso Ciudad Vieja) y realizamos gran parte de la Vía Dolorosa (des de donde le dieron la cruz a Jesús hasta que fue crucificado en el Gólgota) hasta la iglesia del Santo Sepulcro, uno de los lugares más sagrados del cristianismo. Allí se encuentra la roca en la que fue colocada la cruz y la grieta que apareció tras el terremoto que hubo después de su muerte, la roca donde fue aseado y untado con aceites el cuerpo, y la cripta en la que fue enterrado. Hay muchísima gente haciendo cola para ver los lugares sagrados y poner objetos en ellos para que les traigan suerte (sobre todo la roca en la que fue lavado) así como llantos silenciosos de los devotos.
Muro de las lamentaciones, en Sabbat |
Muro de las lamentaciones |
Una de las cosas que más nos ha impresionado (aunque veníamos prevenidos) es la cantidad de gente armada que hay en las calles (policías, ejército, vigilantes, guardaespaldas, indefinidos…). Se respira una calma tensa, aunque nada que ver con los territorios y ciudades palestinas.
Nuestro segundo día en Jerusalén, ya que el día 14/07
visitamos Belén y Hebrón, fue un poco más movido (anécdota al canto), además de
ser el cumpleaños de Raquel (ya son 30). Fuimos a desayunar a un mercado del
centro y después bajamos al barrio
armenio. En ese trayecto perdimos (o nos robaron) la cartera. Fuimos
inmediatamente a la policía que fue “encantadora”, “servicial” y muy muy “útil”;
tanto que ni siquiera quisieron una copia de la denuncia (¿cómo pensaban buscar
o devolvernosla si no tenían constancia de la denuncia?) y cuando la tuvimos
rellenada nos “invitaron muy amablemente” a marchar. Muy amables en general. Un
policía que nos vió con el móvil y el ordenador
haciendo gestiones a pie de calle nos aconsejó ir a objetos perdidos por si
había suerte (éste sí que ayudó). Habiendo perdido ya casi todo el día volvimos
al albergue de muy buen humor. ¡¡Feliz cumpleaños Raquel!!
Milagrosamente por la tarde llamó al hostel un buen
samaritano que dijo haberla encontrado y que trabajaba en un hotel cercano al
nuestro. Fuimos a buscarla y recuperamos la documentación y las tarjetas ya
anuladas, eso sí del dinero no había rastro (y eso que habíamos sacado dinero
esa misma mañana).
Mezquita de Al-Aqsa |
Cupula de la Roca |
Luego nos dirigimos al Monte Sión en el que se encuentra la
estancia de la última cena de Jesús, la tumba del rey David y el Monasterio de
la Dormición, donde se supone que se quedó dormida la Virgen María y nunca despertó. Un poco
decepcionados, porque sólo es un recinto, volvimos al hostel a planificar el día
siguiente: Mar Muerto y salida de nuevo a Jordania.
PD: A pesar de haber visitado tantos sitios bíblicos, no hemos sufrido el "síndrome de Jerusalén"!! Este síndrome se caracteriza en presentar una serie de delirios donde la persona afectada piensa que es un personaje del Antiguo o del Nuevo Testamento. Podemos asegurar que vimos a más de una persona que quería aparentar ser Jesús!!!
PD: A pesar de haber visitado tantos sitios bíblicos, no hemos sufrido el "síndrome de Jerusalén"!! Este síndrome se caracteriza en presentar una serie de delirios donde la persona afectada piensa que es un personaje del Antiguo o del Nuevo Testamento. Podemos asegurar que vimos a más de una persona que quería aparentar ser Jesús!!!
Tener mucho cuidado....por favor. G. Sirgo
ResponderEliminarTranquilos!!! Israel ha sido prueba superada. Es mucho más tranquila que otros destinos que hemos visitado.
ResponderEliminarMuchos recuerdos para todos!!!
Gracias por compartir, soy de México, mi gran ilusión es visitar Tierra Santa, buscando información para conocer más de ese lugar, encontré este interesante relato, me fascinó leerlo, casi me sentía yo en ese sagrado lugar, Dios me ha de permitir estar ahi antes de morir, un gran Saludo para Ustedes, gracias, Rosalinda de Mexico.
ResponderEliminarNos alegra saber que nuestros relatos son útiles y agradables para quien los lea. Si necesitas más información sobre Tierra Santa no dudes en pedirnosla e intentaremos facilitarte toda la información que tenemos.
EliminarUn saludo desde Hiroshima (Japón).